Ahórrate las flores. Mi segundo disco
Después del trompazo del primer disco, la verdad es que no tenía en mi cabeza grabar más. Así de claro. La experiencia con la multinacional había sido tan frustrante que no quería volver a pasar por ello. Que metan tu disco en un cajón es una de las peores experiencias que he tenido en la música.
Te pegas un trabajo increíble y parece que no les importa. Tú intentas transmitirles que esas canciones son tu vida, que han salido de lo más profundo de tu interior y que las tiene que oír todo el mundo pero al “product manager” que me toca no parece importarle.
Así que me vuelvo a Torrelavega, a pasar este mal trago con la familia, con quién si no.
A los pocos días vuelvo a coger la guitarra y a escribir. En un momento así te das cuenta de las cosas que realmente te importan y desde niña necesito cantar y escribir, igual que respirar.
Poco a poco vuelvo a Madrid pero esta vez para buscar conciertos. Y empiezo a tocar cada mes. Unas veces sola y otras con banda. Y el público crece y al bajarme de los escenarios mucha gente me pregunta si no tengo un disco o maqueta que vender.
Qué curioso que uno sienta que algo se ha acabado y sin embargo comience todo. Y cuento esto porque empiezo a conocer a un montón de músicos, productores y compañeros y en realidad a vivir la música.
Entre todos esos músicos hay uno con el que surge una química musical brutal, Pachi García. Él me habla por primera vez del mundo de la autoedición y veo que puede ser mi manera de grabar discos sin depender de nadie y asegurarme sobre todo de que no se quedará en un cajón.
Con la música de Radio Head siempre de fondo empezamos enmaquetar canciones como Me vas a matar o Como el sol, que fue la última en llegar. La última y se convirtió en el primer single. Su vídeoclip tuvo mucho éxito y varios premios y fue exhibido hasta en el Festival de Málaga y yo en mi corazón sentía que se hacía justicia. Desde ese momento supe que las puertas siempre me las abren mis canciones.
Y siento que no necesito que otros crean en mí para creer en misma y en mis canciones. Se pueden ahorrar las flores.